Si estás conduciendo por el campo en las peores carreteras del mundo y te paras en una carretera asfaltada, ya está empezando a traquetear. Puede que no lo oigas en el campo, pero incluso en una carretera perfecta puedes sentir una serie de ruidos procedentes de tu coche: algo se ha soltado en la suspensión.
Como quitar el ruido a los amortiguadores
Aunque es poco probable que su coche pierda piezas vitales en la carretera, debe comprobar la suspensión y los ruidos de ésta por razones de seguridad. Además, ¿quién quiere conducir un coche que hace un ruido como si golpeara el pavimento? Si has conducido tu coche durante muchos kilómetros, no te sorprendas si algunas de las pesadas piezas metálicas que lo sostienen en el duro suelo empiezan a quejarse. Por desgracia, no es fácil encontrar la causa del ruido. La dinámica de un vehículo en movimiento, la complejidad de las suspensiones modernas y la forma en que el sonido resuena en el chasis y la carrocería dificultan la localización del problema. Si oye un chasquido al pasar por los baches, podría deberse al desgaste, con demasiada holgura en las articulaciones. Podría ser una tuerca suelta en el amortiguador, o algo más sutil como un casquillo de goma seco y encogido.
Comprueba si el ruido de fondo es un problema conocido
En primer lugar, busque en Internet los boletines de servicio técnico (TSB) específicos del vehículo relacionados con ese ruido. Estos boletines los emiten los fabricantes de vehículos por problemas conocidos y suelen incluir opciones para arreglar el vehículo, como el rediseño de los componentes de la suspensión. Hay varios sitios web en los que puede buscar las TSB pendientes por marca y modelo de vehículo o por VIN. También puede ponerse en contacto con su concesionario, que debería tener las TSB actuales de todas las marcas que vende.
El ruido del chasis es un problema común, por lo que se han publicado numerosos TSB. Algunos tienen derecho a reparaciones gratuitas por el ruido, mientras que otros dicen que el ruido es sólo una característica del vehículo y debe aceptarse como algo normal. En cualquier caso, este es un buen punto de partida.
Es hora de un rebote
Si no hay ninguna pista, es hora de ponerse manos a la obra. Pide ayuda al amigo más fuerte que tengas. Si oyes un ruido delante de ti, abre el capó y pide a tu amigo que empuje el parachoques o el guardabarros. Suelte y levante repetidamente hasta que la suspensión empiece a funcionar. Por cierto, comprueba los soportes superiores del amortiguador y las juntas de la horquilla con una buena luz.
Si oyes ruidos extraños pero no puedes encontrar el origen, ponte el extremo de un palillo o un destornillador largo en el oído y toca la zona sospechosa con el otro extremo. Esto funciona casi tan bien como un estetoscopio mecánico: ¿sientes algo? Luego túmbate y utiliza una luz para ver qué pasa ahí abajo.
La «comprobación de parada en seco», es decir, la comprobación del juego del engranaje de la dirección, es menos exigente físicamente. Pida al asistente que se siente en el asiento del conductor, gire la llave para desbloquear la columna de dirección y luego mueva el volante hacia adelante y hacia atrás mientras mira todas las partes del volante. Apenas debería haber un juego evidente.
Por cierto, si levantas el coche sobre el chasis, los componentes de la suspensión y la dirección colgarán en un ángulo poco natural, lo que puede enmascarar la acción que buscas. Por lo tanto, coloque gatos y soportes de gato bajo los brazos de control o el eje trasero para soportar el peso de los componentes de la suspensión.
Con el motor al ralentí, pida a un ayudante que sujete el freno y cambie de punto muerto a marcha atrás unas cuantas veces para encontrar los casquillos superiores del bastidor A o de la horquilla dañados. Mantén la vista en el ala mientras el ayudante realiza esta maniobra. Algunos coches tienen elaborados puntales horizontales que permiten que los brazos de control inferiores se muevan hacia delante y hacia atrás. Están montados sobre grandes bujes de goma y se puede oír cómo se mueven si hay un poco de espacio extra. Los puntos de montaje en el bastidor pueden oxidarse, pero esto dará lugar a síntomas de dirección más notables y preocupantes que el simple ruido.
Los coches antiguos con tracción trasera y muelles helicoidales pueden tener la llamada barra Panhard, que va en diagonal desde el chasis hasta el lado de la caja del eje. Los casquillos de la barra de amortiguación pueden ser la fuente del ruido metálico.
En este caso, los amortiguadores o puntales desgastados también son una fuente común.